BOLETÍN #88
No es un momento fácil para el país y la región; los proyectos de muerte, quienes incitan venganza y los ideólogos de “justicia” por mano propia se roban el protagonismo de la agenda ciudadana. A su paso van dejando líderes y lideresas asesinados, desplazamiento de comunidades y graves afectaciones sobre los pobladores que ven el futuro con miedo y desesperanza.

Escrito: Observatorio de Realidades Sociales.
No es un momento fácil para el país y la región; los proyectos de muerte, quienes incitan venganza y los ideólogos de “justicia” por mano propia se roban el protagonismo de la agenda ciudadana. A su paso van dejando líderes y lideresas asesinados, desplazamiento de comunidades y graves afectaciones sobre los pobladores que ven el futuro con miedo y desesperanza.
No les ha bastado con generar dolor colectivo a través del asesinato de Temístocles Machado para que sigan cavilando nuevos golpes al pueblo digno de Buenaventura, en esta ocasión poniendo en la mira al padre Jhon Reina Ramírez, director de la Pastoral Social y miembro del comité del Paro Cívico, quien recientemente fue amenazado.
Ante esa intención de continuar sembrando miedo y poner en peligro la vida en los territorios, expresamos nuestro categórico rechazo por este tipo de actos que buscan amedrentar el servicio honesto y generoso de hombres y mujeres de buena voluntad.
Invitamos a las comunidades para que se unan en un solo espíritu rodeando la vida de líderes sociales de nuestro departamento. Se hace vital que nos unamos por el cuidado de la vida de hombres y mujeres que con su ejemplo animan a las comunidades para que ejerzan la defensa de sus derechos y construyan paz a través del desarrollo social y la dignificación de la vida en el Pacífico colombiano.
Solicitamos a las autoridades del Valle del Cauca y al Gobierno Nacional para que actúen con diligencia frenando esta cadena del mal y para que haya una pronta respuesta en favor de la protección de la vida de este líder religioso. No podemos seguir como si nada estuviera pasando, tampoco podemos continuar sumando hombres y mujeres de compromiso comunal asesinados selectivamente.
Aprovechamos este medio para extender nuestra solidaridad al padre Jhon Reina y hacer un sentido reconocimiento a la labor desarrollada, agradeciéndole de manera especial por su servicio en favor del pueblo de Buenaventura. Somos conocedores de su trabajo como hombre de Iglesia y valoramos profundamente su misión pastoral.